(Prueba X)
Un Museo Universitario: El Museo de Arqueología y Antropología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
Arqueólogo Fernando Federico Fujita Alarcón.
I. Algo de Historia. El lunes 21 de octubre de 1919 comenzó a funcionar oficialmente el que ahora conocemos como el Museo de Arqueología y Antropología; la idea base fue una propuesta del doctor Julio César Tello Rojas investigador y miembro de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, bajo la protección y patrocinio de las autoridades encabezadas por el Rector Javier Prado, liberal pero abierto al diálogo y a las ideas nuevas, no como últimamente sucede en nuestra Casa de Estudios.
Inició como una institución que promovía lo moderno y actual, sus colecciones fueron inicialmente las que aportó la Universidad y el propio Tello, y poco a poco por medio de colecciones científicas y donaciones se incrementaron las colecciones. Con el tiempo hubo cambios de nombres, de lugares, de tamaño y de Directores tales como José Matos, Luis Lumbreras, Rosa Fung, Alcalde y otros miembros, Carlos Del Águila, etc… y otros que sólo lo estuvieron para rellenar su puesto o solamente como parte de un botín a repartir.
Personalmente, estoy vinculado con el Museo desde el año 1985 en con un grupo de cachimbos de la 84 y otros estudiantes del otrora programa de Arqueología comenzamos a conocer el Museo y la Casona; visitábamos los ambientes, y es más, luego de un acalorado debate decidimos hacer nuestra primera práctica oficial remozando las exposiciones emblemáticas del Museo desde los años 70, Instrumentos Musicales Prehispánicos y Orígenes del Perú. Luego hicimos una propuesta de modernización que no se aplicó en su momento, y ya con el tiempo logramos ser, por lo menos tres de estos cachimbos que pesaban menos y tenían más pelo, en los Directores del Museo y que pudimos hacer muchas cosas con tan poco.
II. El espacio. El continente. Inicialmente comenzó a funcionar en el espacio que se eran dos pequeñas salas, un corredor y lo que fuera el campanario de la capilla de San Antón[1] que corresponde a una porción del segundo nivel de ex claustro del patio de los naranjos o letras del actual centro cultural de la Universidad. Luego, gran parte de la colección fue trasladada al actual Museo Nacional del Perú luego de un fuerte sismo[2] y el resto estuvo dando tumbos por algunos predios de San Marcos.
Posteriormente, en los años 70 del siglo XX, el equipo que encabezaba el doctor Lumbreras logró tomar nuevamente como sede del Museo a la Casona de San Marcos y amplía sus locales hasta tener prácticamente los claustros completos del Patio de los Naranjos y los Jazmines. Hasta con el proyecto de restauración y adecuación se generó un nuevo programa arquitectónico de lo que sería el Centro Cultural de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
El actual espacio corresponde a la época de una Directora, como diría Miguel de Cervantes ‘… de cuyo nombre no me quiero acordarme’[3] que no supo negociar ni mantener sus fueros, y el espacio sufrió una mediana implosión física.
III. Contenido. Las Colecciones. Las colecciones se iniciaron con los que colectó el doctor Tello por encargo de la Universidad y lo que compró con su propio peculio o donaciones.
Ya con el tiempo las colecciones fueron corolarios de las campañas o misiones que realizaba la Universidad, o de Investigadores Asociados, o de donaciones de investigadores o de coleccionistas como el doctor Arturo Jiménez Borja[4].
En la época que representó Javier Alcalde se ganó el ‘Premio del Embajador’ que otorga el gobierno de los Estados Unidos de América lo cual permitió dar un mejor espacio y ambiente a las colecciones de cerámica, orgánico y textiles, así como al Archivo Tello.
Posteriormente, se hicieron algunas reformas y protección adecuada de los techos entre la gestión de Del Águila y el suscrito.
Actualmente las colecciones son de origen científico, es decir, proveniente de investigaciones y no son meras obras de arte prehispánico que forman las colecciones provenientes de saqueos.
IV. Las Actividades. El Museo no sólo son salas de exposiciones ni de almacén de diversos materiales muebles, no sólo es área del sector administrativo, sino también es inventario, registro, depósito, conservación preventiva y continua de las colecciones y del continente, es un lugar donde se realizan investigaciones típicas del Gabinete y de soporte de Campo, o integrales (Campo y Gabinete) del propio Museo o de sus asociados como fue el experimento del Programa Waka San Marcos o el Programa Craig Morris, o como parte de las acciones en Ayacucho y otras lugares del Perú, así como convenios tales como con Carania.
Estas investigaciones asociadas y propias, llevan muchas veces a ser origen de exposiciones temporales, o realizar exposiciones temporales y permanentes, estas últimas expresan la identidad del Museo y del proceso de la Identidad Histórica como fue la última exposición permanente de ‘Orígenes del Perú’. Asimismo, se manifiesta en la difusión escrita como son las revistas de bandera como Arqueología y Sociedad (fundada por el equipo del doctor Lumbreras) y el Cuaderno de Investigaciones del Archivo Tello (fundada por el grupo encabezado por la doctora Shady), e igualmente las publicaciones que se auspician de otras instituciones, o se editaban también en el área respectiva como fue el libro La Casona en Tres Tiempos.
También son actividades de difusión el Curso de Actualización de Historia del Perú, la Cátedra Tello, los Miércoles Arqueológicos y Antropológicos, los cursos de conservación, etc… Cabe resaltar también que propusimos un perfomace que se basó en el Manto Blanco, para ello involucramos a la Dirección del Teatro Universitario[5], a la Dirección de Cine y Producción Audiovisual[6], y a la Dirección de Música[7], dicha obra se denominó ‘Y los Paracas Hablaron’, y su estreno mundial se realizó con el lleno total del Salón General del Centro Cultural la noche que presentamos el Cuaderno de Investigaciones del Archivo Tello Nº 7[8]. También, he sido uno de los impulsores de la modernidad, de la difusión virtual, con un programa denominado ‘Conversando para Conservar’ que yo dirigía en el canal web de culturas Desde la Casona en el Centro Cultural, siendo uno de los programas más visto y de continua emisión; así como la página del Facebook ‘Amigos del Museo de Arqueología de San Marcos’
Otros de los servicios es el que ofrece el Archivo Tello, el Centro de Información Secundaria, Editorial, el Cuadro de Investigadores Asociados, el de Conservación y Restauración, Museografía; también la promoción de las colecciones para que sean materia central de investigaciones de tesis dirigido no sólo a Arqueólogos, sino a otros académicos afines, así como el alquiler y depósito de espacio temporales para investigadores para reunir fondos con el fin de investigar y conservar, por ello también se planteó la necesidad de reflotar el Gabinete de Zooarqueología como parte de los servicios del Museo con la colaboración de serias y destacadas personalidades en el ámbito nacional e internacional, y también el de Gabinete de Bioantropología.
Igualmente, han quedado pendientes, el catálogo de las colecciones del Museo, la entrega física de las colecciones de la Waka San Marcos, la colección en el Museo de Arte de San Marcos y la colección del Museo Nacional del Perú, que entre estas tres generaría la necesidad de un espacio equivalente a la mitad del actual Centro Cultural; por ello se planteó que debería haber un anexo en la ciudad universitaria para las colecciones, laboratorios, áreas abiertas, áreas húmedas, áreas secas, exposiciones, etc… o en su defecto usar el área del Colegio Real con el mismo fin.
También quedó pendiente a nivel global Corredor Cultural entre la Waka San Marcos, el Centro de Interpretación de la Waka, el Anexo del Museo y el Rectorado, que unido con otros puntos generaría el Circuito Cultural dentro de la propia universidad y sus componentes patrimoniales.
V. Organización y Funciones. Estas actividades y ocupaciones cotidianas se expresan administrativamente para la Universidad, en su parte burocrática, como un cuadro de asignación de personal que el mínimo requerido de acuerdo a la propuesta que realizamos sería de 20 personas y solamente hay 9 con recargadas labores. Cabe también expresar mi malestar por lo que representa el C.A.S. (Contrato Administrativo de Servicio) que es la explotación que realiza el Estado Peruano y las diferencias que existen con los Designados y los Nombrados, y entre las clases que hay internamente dentro de ellas.
Todo sería más correcto si no existiesen más los C.A.S. sino que fuesen incorporados en sus propias actividades, donde existiese la carrera y la categoría de Investigadores de Carrera, claro está con el verdadero auxilio del sector administrativo, y no el que brinda la burocracia que lo hace como saboteando a todo aquello que los haga trabajar, pero eso es otra historia.
Estas expresiones propias del Museo y de la Administración no sólo se reflejan en el Texto Único de Procedimientos Administrativos, Guía de Servicio y otras manifestaciones como son las propuestas[9] de la Política para el Manejo de las Colecciones y en el Manual del Manejo de Colecciones que expresan no sólo el uso adecuado de las colecciones y su conservación, sino también el proceso y fomento de la investigación, la captación de adecuados investigadores, líneas y programas de investigaciones, entre otras cosas, como son los procesos adecuados de la difusión del patrimonio cultural mueble, de lo material e inmaterial, y sobre todo promover constantemente la reflexión acerca de la Identidad Histórica.
Gracias, por leer este borrador y deseo escuchar tus preguntas y comentarios para terminar de escribir este ensayo.
Lima, sábado 30 de junio de 2012
[1] Luego de la Expulsión de los Jesuitas, la capilla se denominó como San Carlos y luego el predio fue arrebatado por el Ejército para convertirla en el Panteón de los Próceres.
[2] Fue el sismo del año 1940 que afectó seriamente a Lima; en ese entonces el doctor Tello ya planificaba la ejecución de su idea de un gran museo arqueológico que albergase todas las colecciones que hubiesen en el país, sólo siendo la de la UNMSM la que entraría como custodia temporal. Esta situación también fue aprovechada por la universidad para apropiarse de estos espacios académicos y culturales para convertirlos en espacios administrativos y algunos en académicos.
[3] Es parte de la obra ‘El Ingenioso Hidalgo, Don Quijote de la Mancha’.
[4] Colección Arturo Jiménez Borja que se encuentra representada básicamente por instrumentos musicales y representaciones prehispánicas.
[5] Dirigido por don Mario Delgado, afamado Director de Teatro quien formalizó mi idea con su equipo.
[6] A cargo de don Mario Pozzi-Escot, gran documentalista quien con su equipo grabaron los ensayos, la puesta en escena y la edición del perfomance.
[7] La composición musical y fondo lo realizó don Abraham Padilla, afamado músico, compositor y Director de Orquesta.
[8] Este proyecto conjunto fue la idea-base del producto llamado ‘Todos los San Marcos’ que involucra a todas las direcciones del Centro Cultural de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
[9] Que se encuentran en el facebook del Museo.